a una semana del 28-J

Cuando queda exactamente una semana para el 28-J DIA INTERNACIONAL DEL COLECTIVO LGTB no puedo evitar dedicar un post a tal aconteciemiento.

Todos los años son numerosas las manifestaciones que se convocan para estas fechas, tal vez más festivas que reivindicativas, y este año en particular, lamentándolo mucho no comparto ninguno de los manifiestos por los que se convoca tanto la manifestación en Valencia el 28 junio ni la estatal en Madrid el 5 de julio (aunque tengo entendido que miembros del Consejo de Dirección de UPyD sí participaran en ésta última, aun no se si de manera oficial o personal).

Este año no comparto las reivindicaciones ni el lema de las manifestaciones, al menos las de Valencia y Madrid, "POR LA VISIBILIDAD LESBICA" parece ser que a los convocates se les empieza a terminar las "excusas" para sacara a pasear las carrozas por nuestras ciudades. Pienso que hay otros temas más sangrantes para la sociedad y para el colectivo LGTB por el cual se debería de movilizar a los millones de personas que consiguen atraer estas convocatorias. Exigir al Gobierno que promueva políticas internacionales contra la homofobía, exigir al parlamento europeo que no permita que paises de la UE se declaren abiertamente homófobos, exigir una intervención internacional en aquellos paises en los que se vulneran los Derechos Humanos (no en los que se vulneran los derechos petrolíferos), y es que no entiendo como hace dos semanas se teneía en GAMBIA a dos españoles por homosexualidad y los colectivos no reivindican nada, no entiendo como en paises como MARRUECOS y EGIPTO se encarcelan a homosexuales y los colectivos no rivindican nada, y como en paises como IRAN se tortura a latigazos antes de colgarlo desde gruas a los homosexuales y los colectivos no rivindican nada, ahora que tiene la oportunidad de sumar tantas y tantas voces que se juntaran en Madrid el próximo 5 de Julio.

Para que no se nos olvide el nacimiento del movimiento "activista" hoy quiero hacer recuerdo de dos tristes historias pero que marcaron puntos de inflexión en nuestra sociedad, las de Harvey Milk y Matthew Shepard:

"If a bullet should enter my brain, let that bullet destroy every closet door"

(si una bala atraviesa mi cerebro, dejad que esa bala destruya las puertas de todos los armarios) Lo dijo HARVEY MILK Empresario, político y activista estadounidense por los derechos civiles de los homosexuales, fue asesinado a balazos por el ex concejal conservador Dan White en noviembre del 78 en San Francisco. A raiz de este asesinato y de las persecuciones, las continuas actuaciones policiales, el acoso y las vejaciones, surgió la primera manifestación y se oyeron las primeras voces que reivindicaban la equiparación de derechos.

La segunda historia es más reciente, y no pretendo ser sensacionalista con ella, sólo provocar un pequeño sentimiento de relfexión en todos aquellos que piensan lo divertido que resulta subirse a una carroza a bailar, por una lado; y en todos aquellos que ven inncesario que el colectivo LGTB salga a la calle a manifestarse, por otro.

Matthew Shepard era un estudiante gay, de aspecto aniñado y frágil, que estudiaba Ciencias Políticas en la universidad de Wyoming, sita en la ciudad de Laramie. En la noche del 6 de octubre de 1998 o quizá en la madrugada del día 7 fue engañado cuando se encontraba en un bar de la ciudad por dos hombres que se hicieron pasar por gays. Le subieron a un camión y le llevaron hasta un lugar desierto fuera de la ciudad; allí le ataron a la verja de un vallado y le torturaron y golpearon durante horas salvajemente. Después le abandonaron allí atado con unas temperaturas bajo cero.

Un ciclista pasó por allí a las 6 y media de la mañana, casi dieciocho horas después del ataque y al principio le tomó por un espantapájaros. Matthew estaba inconsciente y sufría hipotermia. Su cara estaba llena de sangre, excepto allí donde el reguero producido por las lágrimas la había limpiado. Cuando le llevaron al hospital tenía tantas heridas que los doctores ni siquiera pudieron operarle. Murió cinco días después sin recuperar la conciencia en el hospital de Laramie. Su familia estaba a su lado, su hermano le cogía la mano.

Mientras Matthew moría, algunos estudiantes de la universidad hicieron un muñeco y lo colgaron de la misma verja con un cartel colgando en el que se leía "soy gay", y frases insultantes y groseras en su espalda; eran gente normal, no criminales y se suponía que aquello era una broma.

Este crimen provocó una enorme controversia política porque sirvió para que la mayoría de la gente apoyara que la homofobia debía incluirse entre los llamados "crímenes por odio". Aún teniendo que oir en el juicio que uno de los asesinos alegara como atenuante "pánico gay", por suerte el juez no hizo caso a esta alegación.

Estas historias deben servirnos como motivación para salir a la calle y recordar a la sociedad que no pueden volver a suceder, aunque tristemente son los gobiernos de muchos paises los que promueven que historias así sigan sucediendo a día de hoy, que nos podremos manifestar bailando, en una carroza, con tracas, petardos y petardas, PERO QUE NUNCA DEBEMOS DE OLVIDAR POR QUÉ NACIO EL 28-J.

Para cerrar este post, que al final ha resultado más extenso de lo que pretendía, este año la RAINBOW FLOG cumple 30 años, fue creada por Gilbert Baker, se convirtió en el símbolo del movimiento gay mundial, cuando en 1979 fue utilizada por primera vez en la manifestación de S. Francisco como contestación al asesinato de Harvey Milk. Inicialmente la bandera contaba con ocho colores, de los que se eliminaros el rosa y el turquesa por motivos de producción.